Presupuesto de egresos de la federación 2025 y audiencias digitales
Es un fenómeno común que usuarios con tendencias radicales hagan comentarios despectivos a beneficiarios de programas sociales, reclamando el uso de impuestos en sectores vulnerables de la población.
El presupuesto de egresos de la federación en México, conocido como Paquete Económico, representa las prioridades de las administraciones en turno. El segundo piso de la 4T entró con preocupaciones de los expertos, sobre todo en materia fiscal y desaceleración económica.
Claudia Sheinbaum tomó protesta como presidenta el 1 de octubre, con un legado complejo de decisiones en materia económica que han sido cuestionadas constantemente por la prensa especializada. De hecho, la primera elección del gabinete presidencial ocurrió apenas unos días después de la jornada electoral: Rogelio Ramírez de la O repetiría funciones como secretario de Hacienda, como una medida para frenar la incertidumbre. Los inversionistas y la inversión privada mostrarían nerviosismo por las posibles medidas económicas de continuación del gobierno de AMLO, y esto se reflejaría en las pérdidas del peso frente al dólar y el índice de precios y cotizaciones (IPC). El periodo de transición y las primeras semanas de gobierno de la presidenta también tendría momentos de tensión por la candidatura y luego el triunfo de Donald Trump como presidente (por segunda vez) de los Estados Unidos de América; todo este proceso amenazó la relación comercial bilateral con México. Marcelo Ebrard fue seleccionado como secretario de Economía, en el intento del sexenio entrante por garantizar la estabilidad en la inversión extranjera directa. Sheinbaum no entró con un plan específico de desarrollo económico, pero sí tiene consignas que garantizan la continuidad de las estrategias del gobierno anterior. La presidenta Sheinbaum enumeró 100 puntos de políticas públicas para su sexenio, que en materia económica resaltan la ampliación de programas sociales y la inversión de recursos públicos para finalizar obras de infraestructura como el Tren Maya. Sin embargo, las audiencias más especializadas se mostraron conflictuadas con el principal problema del sexenio entrante: el déficit fiscal histórico que heredó del gobierno saliente. La principal preocupación de la prensa especializada es que la meta de crecimiento económico para 2025 no alcance el 2%-3% propuesto por la Secretaría de Hacienda. Sin embargo, las audiencias en redes sociales ven un problema en el gasto público elevado en el paquete económico. La ampliación en el alcance de los programas sociales no es bien vista para los usuarios de redes sociales como X, quienes proyectan narrativas de desaprobación hacia el sexenio entrante. Es un fenómeno común que los usuarios con tendencias radicales hagan comentarios despectivos hacia los beneficiarios de programas sociales, reclamando el uso de los impuestos en sectores vulnerables de la población. Estos argumentos son, en el mejor de los casos, triviales y reduccionistas para entender la pobreza multidimensional en la que viven poco menos de la mitad de población en México. Los temas de economía, especialmente los que están relacionados con el gasto público, son difíciles de entender para las audiencias generalizadas. En primera, el paquete económico se discute en ambas Cámaras antes de su aprobación. Pero con un Congreso totalitario, es una garantía que la versión del presupuesto que se propone es aquella que será ejecutada por la Secretaría de Hacienda sin ningún tope de posible revisión. Es esta condición la que provoca el nerviosismo en la inversión privada, quienes están sujetos a condiciones fiscales que posiblemente no son racionales para el balance entre las utilidades y el costo de invertir en México (impuestos sobre la renta). Poco o nada tienen que ver los programas sociales en las decisiones de inversión privada en México: la garantía de contratos, el Estado de Derecho y el déficit fiscal controlado son las razones que mantienen los proyectos de inversión privada dentro del territorio nacional. Los temas de economía son caldos de cultivo para la desinformación en redes sociales, y las explicaciones de los mecanismos económicos son meramente reduccionistas. Por ejemplo, la Secretaría de Economía no define ni imposibilita la creación de programas sociales; más bien es un intermediario entre los sectores productivos y el gobierno para crear estrategias sostenibles de crecimiento económico. Otro tema completamente desdibujado en la esfera digital es el diseño y la ejecución del presupuesto federal. Para 2025, la bolsa es de un poco más de 9 billones de pesos, pero la recaudación es de 8 billones: el billón de diferencia tendrá que provenir de la contratación de deuda federal, que no es un escenario deseable para el perfil progresista de esta administración. Los usuarios en redes sociales tampoco saben explicar el papel del tipo de cambio y los ingresos petroleros. El precio del dólar impacta directamente en los intereses de la deuda nacional, además de condicionar los rendimientos de los proyectos de infraestructura que están financiados por futuros (acciones que ofrecen utilidades con tasas crecientes en el largo plazo).
La caricaturización de Pemex como un elefante improductivo y endeudado tampoco le hace un favor al entendimiento de las finanzas públicas en redes sociales. La producción petrolera en México estará sujeta a la dependencia energética de Europa y a los cambios geopolíticos inminentes en el mundo. Los posibles escenarios son críticos, pero la prensa y las audiencias especializadas no les están prestando demasiada atención. Por ejemplo: el precio del barril está proyectado en 57 dólares en 2025, pero el PEF declara que al cierre de 2024 la mezcla de petróleo mexicano costaba 70 dólares en el mercado energético. La estimación es conservadora si la comparamos con las expectativas de la producción petrolera del sexenio pasado, en el que se promovió la construcción de dos refinerías que no tuvieron el impacto deseado en el desarrollo económico del país. Para las grandes audiencias, las explicaciones sobre los mecanismos de los ingresos petroleros son ralas y poco conexas, por lo que estos temas se prestan para la generación de noticias falsas. Es importante reconfigurar la agenda de los medios digitales para hacer amplios los temas económicos más complejos, la desinformación sobre este tipo de noticias es mucho más fácil de diseminar. La coyuntura de la renegociación del T-MEC es un buen momento para considerar la explicación neutral de tópicos técnicos en redes sociales, porque tienen el potencial de afectar la vida económica de la población. ____ Nota del editor: Alejandra G. Marmolejo es profesora de ciencias sociales en el Tecnológico de Monterrey y miembro del Observatorio de Medios Digitales . Síguela en Threads como @alegmarmo Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente a la autora. Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión]]>
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